Ya
existen más de 770 millones de teléfonos inteligentes con GPS capaces
de dar a conocer los datos de localización de los dispositivos. Las
posibilidades de estos servicios para el consumidor y para las empresas
van más allá de sus dispositivos a la hora de poder beneficiarse del
uso de aplicaciones como Foursquare o Shopkick. Un reciente informe de BI Intelligence sobre la localización de datos analizó las oportunidades que surgen en el nuevo paradigma móvil y local.
En especial, se examinó cómo la ubicación aplicada a la publicidad móvil había generado entusiasmo y elevado la participación de las aplicaciones. También se pretendía desmitificar los problemas de privacidad que esta localización podría acarrear.
Desde un enfoque puro de la ubicación GPS, la localización se genera conociendo los datos de latitud y longitud. Sin embargo, existen al menos otros cuatro métodos, que pueden emplearse en ocasiones de forma combinada, para conocer la ubicación.
Datos de la antena móvil: cuando las señales no alcanzan el chip GPS del dispositivo, lo cual ocurre a menudo en interiores, el dispositivo reportará su posición a través de la antena de telefonía móvil a la que esté conectado y se estimará la distancia a la misma, con la consiguiente pérdida de precisión.
Wifi: las redes de conexión a internet ofrecen también las coordenadas del sistema GPS. De esta forma se puede conducir a un usuario a una tienda específica , por lo que muchos comerciantes están creando sus propias red wifi públicas y gratuitas para activar publicidad móvil en sus tiendas o cerca de ellas.
Dirección IP: la ubicación puede ser también medida a través de la dirección IP que va asociada a la conexión de datos. La precisión de este método varía en función de la compañía y resulta menos fiable que los métodos anteriores.
Información del usuario: cuando los usuarios se conectan para consultar su correo elegrónico o se registran en aplicaciones móviles y servicios, habitualmente ofrecen su dirección y código postal. Estos datos pueden ser transformados en coordenadas GPS para construir perfiles en función de la localización de uno o varios usuarios. La capacidad para recopilar estos datos ha platenado algunas preocupaciones sobre la privacidad. Sin embargo, los sistemas Android e iOS ofrecen a los usuarios la posibilidad de no activar estos datos en su configuración.
Existen muchas nuevas oportunidades que surgen de este contexto móvil para el comercio local entre las que destacan, como se ha visto, la localización que permite la llegada publicidad, las búsquedas basadas en la cercanía y otras aplicaciones que muevan a la participación.
En especial, se examinó cómo la ubicación aplicada a la publicidad móvil había generado entusiasmo y elevado la participación de las aplicaciones. También se pretendía desmitificar los problemas de privacidad que esta localización podría acarrear.
Desde un enfoque puro de la ubicación GPS, la localización se genera conociendo los datos de latitud y longitud. Sin embargo, existen al menos otros cuatro métodos, que pueden emplearse en ocasiones de forma combinada, para conocer la ubicación.
Datos de la antena móvil: cuando las señales no alcanzan el chip GPS del dispositivo, lo cual ocurre a menudo en interiores, el dispositivo reportará su posición a través de la antena de telefonía móvil a la que esté conectado y se estimará la distancia a la misma, con la consiguiente pérdida de precisión.
Wifi: las redes de conexión a internet ofrecen también las coordenadas del sistema GPS. De esta forma se puede conducir a un usuario a una tienda específica , por lo que muchos comerciantes están creando sus propias red wifi públicas y gratuitas para activar publicidad móvil en sus tiendas o cerca de ellas.
Dirección IP: la ubicación puede ser también medida a través de la dirección IP que va asociada a la conexión de datos. La precisión de este método varía en función de la compañía y resulta menos fiable que los métodos anteriores.
Información del usuario: cuando los usuarios se conectan para consultar su correo elegrónico o se registran en aplicaciones móviles y servicios, habitualmente ofrecen su dirección y código postal. Estos datos pueden ser transformados en coordenadas GPS para construir perfiles en función de la localización de uno o varios usuarios. La capacidad para recopilar estos datos ha platenado algunas preocupaciones sobre la privacidad. Sin embargo, los sistemas Android e iOS ofrecen a los usuarios la posibilidad de no activar estos datos en su configuración.
Existen muchas nuevas oportunidades que surgen de este contexto móvil para el comercio local entre las que destacan, como se ha visto, la localización que permite la llegada publicidad, las búsquedas basadas en la cercanía y otras aplicaciones que muevan a la participación.
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